El código lumínico

Dentro de la dimensión visual, correspondiente al texto visual que aparece en la pantalla, es decir, la selección de espacio icónico que se aplica en la fotografía, la película, el video, la televisión y recientemente en las imágenes generadas por computadora, encontramos el código lumínico.

El código lumínico se refiere al tratamiento luminoso por el que se representa la imagen y el tema en general. Contempla a) la naturaleza de la luz, b) su calidad, y c) dirección.

a) La naturaleza de la luz distingue entre:
Luz natural. Proporcionada por la luminosidad del día.
Luz artificial. Proporcionada por la iluminación artificial.

b) Su calidad, alude a la luz fría, luz cálida o luz de color.

c) La direccionalidad, a la situación espacial y variedad de la fuente luminosa. Para conseguirlo se emplean al menos cuatro fuentes de luz:

Luz principal (key light)
Luz de relleno, secundaria o complementaria (fill light)
Luz posterior, detrás o contraluz (back light)
Luz de fondo

La combinación de estas características de la luz, que tantos significados van a añadir a las imágenes, se agrupan bajo el término genérico de tratamiento de la luz.

Una luz frontal aplasta las figuras y les da un aspecto vagamente irreal; la iluminación posterior separa las figuras del fondo y agrega tridimensionalidad a la imagen; la luz lateral y la cenital, que se dirige de arriba abajo, acentúan volúmenes; y la luz de abajo a arriba puede producir deformaciones inquietantes o siniestras.

La luz, independientemente de su procedencia, es energía luminosa que incide en los objetos y su reflejo impresiona, estimula nuestra retina. La luz puede estar dentro de las imágenes, participar en el proceso creativo, o ser exterior y jugar sólo un papel en la percepción de las formas. Luces y sombras se capturan a través de los diversos tipos de cámara.

La luz puede determinar el significado de la imagen, mostrando de manera evidente algunas cosas y ocultando otras por medio de luces y sombras, es decir, crea atmósferas determinadas para producir muy diversas sensaciones.
Se pueden distinguir dos tipos básicos de iluminación: iluminación suave e iluminación dura.

Iluminación suave

La iluminación suave o tonal, es una iluminación difusa que reduce los contrastes excesivos y permite apreciar bien los detalles a la sombra; se puede conseguir compensando adecuadamente la luz principal (interior o exterior) con luz de relleno.

Es una iluminación plana, angulada, igualada y menos dramática que la iluminación dura, proporciona una apariencia agradable a las personas.

Iluminación dura

La iluminación dura o de claro-oscuro, es un tipo de iluminación direccional que sirve para destacar las formas y contornos de las personas y objetos. Produce un fuerte contraste. Mientras que la luz dura o directa establece alteraciones bruscas, por su parte, la luz suave, facilita las mezclas poco contrastadas.


Hay tres elementos que condicionan la iluminación en un set: 1) el movimiento de los actores y objetos delante de la cámara, 2) la sucesión de un plano a otro y la continuidad de luz entre ambos, y 3) la rapidez de la sucesión de los planos que exige a la luz el papel de dar a conocer con precisión lo que sucede e interesa más de cada plano.

Sin embargo, cuando intentamos crear atmósferas ambientales para una producción audiovisual podemos recurrir a: la luz difusa, que se obtiene por medio de difusores y no produce sombras, distribuyéndose de forma uniforme; imita o refuerza efectos naturales de la luz ambiente. Y la luz directa, la cual produce sombras en los objetos y sombras proyectadas por éstos; se consigue el modelado de los volúmenes de los objetos produciendo sombras convenientemente estudiadas en su superficie, el dibujo de los contornos de los objetos con haces de luz directa que caen desde arriba y en dirección contraria al ángulo de la cámara, y el contraluz situando la cámara encarada hacia los haces luminosos.

En el arte de la iluminación encontramos tres estilos: 1) de manchas; consiste en distribuir por las superficies y perfiles del decorado, escasamente iluminado con una débil luz difusa, todo un conjunto de manchas luminosas, 2) de zonas; consiste en crear una serie escalonada de zonas de luz de mayor a menor luminosidad. Este sistema centra la atención, ayuda a expresar la distancia, y crea un ambiente, y 3) de masas; imita el efecto natural de la luz. No es preciso que el motivo esté constantemente iluminado.

Código lumínico en la fotografía

Se refiere al tratamiento luminoso por el que se representa la imagen y el tema en general.
Contempla la naturaleza de la luz, su calidad y dirección.
La naturaleza de la luz diferencia entre luz natural y luz artificial, mientras que su calidad, alude a la luz fría, luz cálida o luz de color.
La direccionalidad, a la situación espacial y variedad de la fuente luminosa, (principal, de relleno, general, complementaria... única, múltiple, proyectada...)

La combinación de estas características de la luz, fundamento esencial de la fotografía, y que tantos significados van a añadir a la imagen, se agrupan bajo el término genérico de tratamiento de luz.
Una luz frontal aplasta las figuras y les da un aspecto vagamente irreal; la iluminación posterior separa las figuras del fondo y agrega tridimensionalidad a la imagen; la luz lateral y la cenital, que se dirige de arriba abajo, acentúan volúmenes; y la luz de abajo a arriba puede producir deformaciones inquietantes o siniestras.